...Pero nuestro mundo
fue invadido, y nuestros círculos quebrados. Fueron obligados por fuerzas
poderosas a encajarse en círculos creados por el dios todopoderoso que trajeron
consigo a esta tierra para ampliar sus dominios. Nos desconcertó al ver que su
único dios era representado clavado de pies y manos a un madero en forma de
cruz. Pero esos cristianos, así decían llamarse, afirmaban que es el hijo de su
dios. ¿Cómo entender a un dios que puede castigar a un hijo de ese modo tan
espantoso? Y por algo grave debe haber sido, porque a los nuestros los
respetamos y no los representamos con imágenes dolientes de hijos, porque
nuestros dioses no los tienen. ¿Para qué? Si no hay necesidad. Ya que a
nuestros dioses los vemos reflejados en las flores, en los animales, en el
cielo, en el sol, en la luna, en las nubes y en todo lo que nos rodea. Que para
eso es la creación, y la creación es un regalo sagrado. Da pena y rabia
recordar las situaciones forzadas a que nos sometieron…